La artista visual convierte al ave nacional en símbolo global de identidad, biodiversidad y cultura criolla a través de su obra.
La artista dominicana Yubo Fernández continúa dejando huella en el mundo del arte internacional con su colección “La Cigua Palmera”, una serie de obras que rinden tributo al ave nacional de República Dominicana.
A través de pinturas y esculturas, Fernández utiliza la figura de esta pequeña ave endémica como una metáfora viva de la identidad dominicana, llevando su mensaje desde Santo Domingo hasta galerías de Europa, ferias en América Latina, Corea del Sur y exposiciones en New York.
“La Cigua Palmera” no solo destaca la belleza del ave, sino que invita a reflexionar sobre la biodiversidad, el patrimonio natural y el orgullo nacional. Cada obra combina técnica, emoción y un profundo amor por la tierra que la vio nacer.
“Cada pincelada y cada trazo en mis obras llevan el eco del bosque, del canto de la cigua, de la tierra fértil de mi isla. Es mi manera de decirle al mundo que República Dominicana, además de hermosas playas, es cultura, biodiversidad y creatividad”, expresó Fernández en una exposición reciente en Nueva York.
Con una carrera consolidada y reconocida por la crítica internacional, Yubo se ha transformado en una embajadora cultural que promueve una narrativa distinta de lo dominicano, más allá del turismo y los estereotipos.
Su propuesta artística conecta la fauna nacional con una visión estética contemporánea que dialoga con el público global. La cigua palmera, en sus obras, se convierte en símbolo de resiliencia, belleza y pertenencia.
La trayectoria de Fernández no solo resalta por su talento, sino por su capacidad de construir puentes entre culturas, promoviendo una República Dominicana más visible en los espacios artísticos internacionales.