Juventud, tradición y naturaleza posicionan a estas provincias como los destinos más hospitalarios del país, según datos de calificaciones cinco estrellas.
La hospitalidad dominicana tiene nombre y apellido. Según un informe reciente de Airbnb, las provincias de Monte Cristi, Barahona y Hato Mayor encabezan el top tres de destinos más hospitalarios de República Dominicana, basándose en la cantidad de calificaciones cinco estrellas otorgadas por los huéspedes durante el 2024.
Airbnb, la plataforma de alojamiento líder a nivel mundial, destaca que estos lugares no solo sobresalen por la calidad de sus espacios, sino también por el trato cálido de sus anfitriones, quienes han convertido la amabilidad en una marca personal. Cada detalle cuenta: desde la limpieza, la rapidez de respuesta, hasta el valor de la experiencia.
Barahona, en la región Sur, ha registrado un crecimiento del 40% en jóvenes anfitriones menores de 30 años, quienes ahora representan más del 15% del total. Esta combinación entre juventud y autenticidad convierte a Barahona en una joya natural y cultural del turismo dominicano.
Monte Cristi, por su parte, mantiene una hospitalidad arraigada en la experiencia. Cerca del 20% de sus anfitriones son adultos mayores, lo que aporta una calidez tradicional que se refleja en cada encuentro con los visitantes. Esta zona del Cibao es reconocida por su herencia agrícola y su estilo de vida tranquilo.
En la región Norte, particularmente en zonas como Hato Mayor y El Valle, el crecimiento ha sido de casi un 45% en nuevos anfitriones, destacando que el 35% de ellos son mujeres. Este destino se ha consolidado entre los favoritos de los amantes de la naturaleza, gracias a su cercanía con el Parque Nacional Los Haitises y la oferta de ecoturismo durante todo el año.
Airbnb también ha querido destacar al anfitrión más hospitalario del país: José, de Jarabacoa, quien ha recibido la mayor cantidad de evaluaciones con cinco estrellas. “Para mí, Airbnb ha sido una bendición tanto económica como en bienestar; paso más tiempo con mi familia y también nos ha hecho crecer en el negocio… seguiremos trabajando con amor y dedicación”, compartió emocionado.
Este ranking no solo reconoce la excelencia de los destinos, sino también la dedicación de los dominicanos que abren sus puertas con una sonrisa, demostrando que en este país, la hospitalidad es un arte que se hereda y se transforma con cada generación.