Hallowen o Víspera de todos los Santos, también conocido como Noche de Brujas, o Noche de Víspera de difuntos, es una celebración modera resultado del sincretismo originado por la cristianización de las fiestas del fin de verano de origen celta llamada Samhain.
Se celebra internacionalmente en la noche del 31 de octubre.
Sus raíces están vinculadas con la conmemoración celta del Samhain y la festividad cristiana del Día de Todos Los Santos, celebrada por los católicos el 1 de noviembre. Se trata de un festejo secular , aunque algunos consideran que posee un trasfondo religioso. Los inmigrantes irlandeses transmitieron versiones de la tradición a América del Norte durante la Gran hambruna irlandesa.
El día se asocia a menudo con los colores naranja, negro y morado y está fuertemente ligado a símbolos como la Jack-’o'-lantern. Las actividades típicas de Halloween son el famoso Dulce o truco y las fiestas de disfraces, además de las hogueras, la visita de casas encantadas, las bromas, la lectura de historias de miedo y el visionado de películas de terror.
En algunos países de Hispanoamérica se acostumbra a salir por la noche con los niños más grandes disfrazados a pedir dulces. Los mayores suelen acudir a fiestas nocturnas después de llevar a los más pequeños a pedir dulces.